Los comerciantes denunciarán al Ayuntamiento por «acoso y derribo»
PEPE ORTEGA Las obras a discreción por toda la ciudad están perjudicando gravemente a los comerciantes según Aprocom
Sábado, 05-09-09
ALBERTO GARCÍA REYES
SEVILLA. La Confederación de Comercio de Sevilla, Aprocom, irá a los juzgados para poner solución a la «agresión que se está haciendo al comercio de esta ciudad por parte del Ayuntamiento». Según indicó a ABC el portavoz de esta asociación, José Aycart, el próximo martes se celebrará una junta directiva en la que «decidiremos qué tipos de medidas vamos a tomar a partir de ahora, entre las que también se encuentran las judiciales, por supuesto». Estas acciones se sumarán a la queja que esta misma semana ha trasladado Aprocom al Defensor del Pueblo por «las actuaciones del Ayuntamiento que están perjudicando muy seriamente el tejido comercial de la ciudad». Según Aycart, «la acción más llamativa contra el comercio es la de las obras, pero también hay otras como la retirada de la subvención que había para el comercio a través de Sevilla Global, la utilización del alumbrado navideño como arma arrojadiza ya que en este momento no sabemos qué calles son las que se van a iluminar, y por último y más importante, la ya citada actuación indiscriminada en las zonas comerciales con obras sin la debida información, sin medidas que palíen los efectos negativos de las obras sobre los comercios, y la restricción seria de la movilidad que hace que la actividad comercial sea poco menos que imposible».
Para Aprocom, «se están vulnerando los derechos de unos ciudadanos que aportan al PIB de Sevilla más del 50 por ciento», por lo que «entendemos que hay un abuso de poder por parte de la Administración y que, por tanto, el Defensor del Pueblo debería de intervenir». Además, en la junta del próximo martes 8 de septiembre, que se celebrará a petición de las asociaciones de Los Remedios, Triana, Luis Montoto y Alcentro, se aprobará el inicio de las acciones por la vía judicial, además de otras medidas para informar al propio PSOE a nivel autonómico del «acoso y derribo al que nos está sometiendo este Gobierno municipal». Y es que los comerciantes ya han explotado. Después de varias reuniones con diversos miembros del Ayuntamiento, «tuvimos una respuesta que entendíamos como muy positiva por parte del delegado de Urbanismo, el señor Gómez de Celis, que se comprometió a que cualquier obra con una duración de más de seis meses contendría un plan de impacto social que evitaría los desmanes que se están produciendo en Sevilla, pero este estudio de impacto social requiere un tiempo y mucho nos tememos que cuando vea la luz ya no haya comerciantes que defender».
Así que Aprocom ha decidido incrementar su ofensiva contra el Ayuntamiento para intentar evitar «la masiva actuación municipal, que no tiene en cuenta la opinión de los comerciantes». Aycart señala que «no sabemos si, aparte de los coches, este Gobierno quiere quitar también los comercios, por eso nosotros denunciamos la falta de consideración hacia el sector comercial y no sólo comercial, porque nos hacemos eco de la situación de otros sectores como los hosteleros, hoteleros...».
Cierre de negocios a diario
Según Aprocom, las obras acometidas por el Ayuntamiento se están produciendo en un momento fatídico para los comercios, que «están cerando locales a diario». De hecho, la asociación ya ha iniciado el trabajo para «dar parte de los comercios que han cerrad, porque hasta ahora estamos manejando las cifras oficiales del Ministerio Trabajo. Lo que nosotros denunciamos es que los puestos de trabajo se pierden porque deja de haber negocios que lo generen. La pérdida de riqueza en Sevilla está llegando a extremos insoportables en un momento de crisis. El Ayuntamiento debería estar paliando la situación y aportando medidas para que los puestos de trabajo no se destruyeran, pero nos encontramos circulando en una autopista en dirección contraria con el Ayuntamiento pisando el acelerador a toda velocidad».
Por todo ello, y en tanto que «estamos en una situación de emergencia ante el ataque inadmisible del Gobierno municipal», los comerciantes han decidido pasar a la acción. «Esto no es una cuestión de ideología -aclara Aycart-, ni siquiera estamos discutiendo un modelo de ciudad, con el que estamos de acuerdo. pero nos quejamos de la utilización fraudulenta de la palabra peatonalización porque lo que en realidad han hecho es restringir el tráfico». Los comerciantes están también indignados por la respuesta que a todas sus quejas a dado el alcalde: «Una frase muy representativa es la que ha dicho el propio Monteseirín sobre San Jacinto: que soporta mucho tráfico y hay que recortarlo. Eso es un disparate. Si quiere quitar el tráfico tiene que dar una alternativa, no prohibirlo. Puestos a hacer disparates, ¿por qué no hacemos un jardín en el Quinto Centenario, que también tiene problemas de tráfico?».
En definitiva, Aprocom justifica el endurecimiento de su estrategia con un argumento diáfano: «Cientos de familias han perdido o están a punto de perder su trabajo y su patrimonio por culpa de esta agresión municipal».
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